¿Por qué te fuiste?
¿Dónde estabas
mientras yo me estampaba
una y otra vez contra las
olas?
¿Qué hiciste
en mi ausencia?
¿A cuántos cerebros conociste
y cuántos enloquecieron?
¡No!
Era yo el que te huía,
el que te temía desde que un
día
descubrí tu belleza
en algún rostro oscuro
que relampagueaba.
Fui yo el que no siguió la
estela
cuando me la mostraste,
y tuve que volver a
amarte
para perder el miedo a las
estrellas.
Y ahora ya sólo puedo
sobrevivir la tormenta que
son tus ojos
siguiendo una pista:
mi voluntad.
Haz que llegue a buen puerto.
Me gusta mucho, Bece :)
ResponderEliminarYa verás qué guay va a salir lo de la radio. De aquí a 5 años, eres el nuevo Lorca ;)
Ya claro, y Nobel de Literatura en 10, no te jode. Gracias mamoncete!
ResponderEliminar